Jugar al aire libre reporta múltiples beneficios. Los juegos infantiles forman parte del desarrollo infantil. Compartir juegos y actividades en el parque, en el patio de la guardería o en espacios abiertos hace que los niños se vuelvan sociables, creativos, aprendan a compartir y a defenderse. Y, sobre todo, en Chiquilin queremos que los niños aprendan… ¡a divertirse!.
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Jugar al aire libre: lo mejor para el niño
Hace años, los niños, sobre todo los que vivían en zonas rurales o de poco tránsito, solían pasar horas y horas en la calle jugando al balón, a las canicas, a la comba y a un montón de juegos imaginativos y divertidos. Hoy en día las cosas han cambiado y los juegos al aire libre se han visto sustituidos por consolas, ordenadores, tablets y todo tipo de artilugios electrónicos. A ello hay que sumar la falta de tiempo de los padres, de zonas verdes o la imposibilidad de salir a jugar en el centro de las grandes ciudades. Sin embargo, jugar en espacios abiertos es fundamental para estimular la creatividad del niño.
Los pediatras recomiendan que los pequeños realicen actividades al aire libre a diario, al menos durante una hora.
Estar al aire libre fomenta la creatividad
Entre las muchas ventajas que tiene para el niño pasar tiempo en espacios abiertos está el hecho de que se potencian sus cualidades psicológicas: esto se refleja en el aumento de su creatividad, curiosidad y toma de decisiones. El niño aprende a resolver dificultades mediante la imaginación.
Los espacios cerrados como ludotecas y lugares públicos de juegos están organizados y ya contienen elementos para que el niño juegue: bolas, toboganes, columpios… Sin embargo, en un espacio abierto en el que no existen estos elementos, será él quién establezca los límites y reglas con ayuda de su imaginación.
El contacto con la naturaleza también permite al pequeño interactuar y relacionarse con otros niños de su edad. Para algunos, en especial los hijos únicos, es muy beneficioso salir de su entorno, relacionarse y tener contacto con otros iguales.
Beneficios de pasear al aire libre para los recién nacidos
Los recién nacidos también necesitan recibir los beneficios del sol. Lo recomendable para los bebés es que en invierno salgan bien abrigados y en las horas de sol mientras que en verano los paseos han de producirse cuando no haga calor y con ropa ligera.
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